Huevitos de Chocolate: Fiestas de Pascua más saludables

Se vienen las Fiestas de Pascua de Resurrección, donde la tradición para conmemorar este domingo se traduce en que los niños busquen los huevitos de chocolate que les trajo el Conejo de Pascua por todos los rincones del hogar. Sin embargo, por más colorido y resplandeciente que luzca su envoltorio o deliciosas que sean estas pequeñas piezas de chocolate, hay que tener conciencia de que son golosinas que en grandes cantidades dañan la salud.

De acuerdo a la nutricionista de Centromed Ángela Jara, si va a comprar chocolates, es mejor preferir aquellos de mejor calidad. Es decir, con una mayor concentración de cacao y menos contenido graso. Asimismo, agregó que: “se debe limitar la cantidad de los chocolates, ya que el consumo indiscriminado evidentemente supone una sobre carga calórica, especialmente en niños en donde su requerimiento es menor”.

En relación a las porciones que deberían comer los huevitos, la profesional manifestó que mientras menos cantidad es mejor, más aun considerando los niveles de obesidad y sobrepeso infantil.

¿Qué le puede producir a un niño comer mucho chocolate?

Antes de explicar los daños que podría provocar a un niño consumir grandes cantidades de huevitos de chocolate, es importante destacar que el principal problema es que la mayor parte del “chocolate” que venden en el comercio no es 100% cacao, sino que es un sucedáneo rico en grasas saturadas.

En este contexto, el gastroenterólogo de Centromed, Dr. Simón Sacks, explicó que si el chocolate fuera Cacao, no habría problema porque es un excelente alimento y antioxidante. De la misma manera, agregó que desde el punto de vista digestivo un excesivo consumo de chocolate sucedáneo provoca la sensación “empacho” y de que “algo cayó mal”, donde los síntomas característicos son vómitos y diarrea. Por otra parte, hablando desde el punto de vista de la salud, comer de estos chocolates significa llenarse de grasa indeseable en nuestro organismo.

Responsabilidad de los padres

La nutricionista Ángela Jara fue enfática al señalar que ninguna golosina, incluyendo a los huevos de pascua, por su alto contenido de azúcares no son recomendables para los niños, por lo que no debiera ser considerar como parte de alguna recomendación de índole nutricional.

Finalmente, la experta destacó que no son los niños los responsables de la ingesta de estos alimentos, ya que son los adultos quienes están a su cargo, y por ende el límite de la ingesta es de exclusiva responsabilidad parental.

Por esta razón, durante Semana Santa es tarea de los padres celebrar con sus hijos de una manera más saludable, ideando otro tipo de actividades de recreación que no se no se asocien precisamente con la comida.